El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas), en colaboración con apicultores del municipio berciano de Igüeña, ha realizado una nueva actuación demostrativa de cierre de protección de colmenares con sistemas eficaces que impiden la destrucción de las colmenas por el oso pardo.
Apicultores de las localidades de Pobladura y de Tremor han participado en la instalación de un colmenar cuyos sistemas de protección el Fapas lleva años experimentando para garantizar que la apicultura se pueda desarrollar en las zonas de montaña donde viven los osos.
El incremento de la presencia del oso en estas zonas de El Bierzo es notable, según cuentan los apicultores cuestión, que se constata por los permanentes daños de los osos a las colmenas. Reconocen que desde hace años ha habido presencia esporádica de algún oso que se acercaba a las colmenas, eran visitas que dejaban destruidas algunas colmenas pero que no se repetían de manera constante.
Desde hace dos o tres años, estas visitas son constantes y prácticamente todos los colmenares de estas montañas han tenido daños de osos. Fapas ha podido comprobar que en general los sistemas de protección instalados por los apicultores para evitar que el oso entre en sus colmenares son deficientes e incluso muchos colmenares no poseen ningún sistema de protección.
Para el Fapas defender la apicultura de montaña es una estrategia para la conservación de la biodiversidad muy importante. Las colmenas de los apicultores favorecen a los ecosistemas naturales a través de la polinización, más ahora que la abeja melífera en estado silvestre está prácticamente extinguida a causa de las enfermedades y la infección de sus colonias por parásitos.
Durante las próximas semanas, el Fapas, que cuenta con el apoyo de la Fundación Príncipe Alberto de Mónaco, va a proceder a la protección de varios colmenares en colaboración con los apicultores en el entorno de las localidades de Tremor en el Bierzo y Riello en la comarca vecina de Omaña que están siendo constantemente visitados por el oso.