El consejero de Fomento y Medio Ambiente, el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones, presentó este lunes las obras de restauración ambiental de la antigua cantera de Catisa en el municipio berciano de Carucedo, unos trabajos a los que el Ejecutivo autonómico destinará una inversión de más de un millón de euros para restaurar una superficie total de 38 hectáreas. La explotación, que afea la postal del paraje Patrimonio de la Humanidad de Las Médulas, le causó en su día una pena de cuatro años de cárcel a su promotor, José Luis Martínez Parra, consejero delegado de Catisa e hijo del histórico empresario José Martínez Núñez, ya fallecido.
Suárez-Quiñones prometió ya en 2016 que la administración autonómica se encargaría de la restauración de la cantera de Catisa si la propiedad no daba cumplimiento a la sentencia judicial que así lo reclamaba tras acreditar que la explotación durante años de esta cantera de piedra caliza provocó la alteración del paisaje, así como vertidos a un arroyo y un embalse cercanos.
La sentencia ya condenaba al responsable de Catisa a pagar 475.000 euros a la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León para actuaciones de restauración en la citada cantera, denominada Peña del Rego, situada en la zona periférica de protección de Las Médulas. La Fiscalía de Área de Ponferrada tomó cartas en el asunto en 2014 tras una denuncia formulada por el colectivo Ecobierzo. El Ministerio Fiscal abrió expediente y pidió la paralización de la actividad, ya determinada en un proceso anterior. Fue a renglón seguido cuando el Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta abrió un procedimiento sancionador contra Catisa.
Durante la visita de este lunes, el consejero destacó la importancia de este proyecto de renaturalización para reducir el impacto visual de una explotación visible desde el mirador de Orellán, uno de los enclaves más importantes en el paraje Patrimonio de la Humanidad de Las Médulas.
En la jornada de este lunes, se firmó el acta de replanteo de la obra, que supondrá la plantación de 10.500 árboles y arbustos autóctonos en esta zona conocida como Peña el Rego. La empresa Canteras Industriales del Bierzo (Catisa) tuvo la autorización de la explotación de recursos desde el año 1968 hasta agosto de 2020. Los trabajos, financiados por la Junta a través de Somacyl, se licitaron el pasado 3 de enero y se adjudicaron a la empresa Herrero Temiño. La intervención recibió el visto bueno del Consejo de Gobierno el pasado 28 de diciembre.
En una primera fase, se desmantelarán las instalaciones existentes y se llevará a cabo el tratamiento de residuos generados por la explotación. Durante esta etapa de las obras, se demolerán los edificios y muros que quedan en pie y se desmontarán las instalaciones tipo grúa o silos. Además, se eliminarán los vertidos incontrolados de escombros acumulados desde el cierre de la cantera.
La segunda fase de los trabajos consistirá en la estabilización de los taludes, a través de movimientos de tierras de unos 80.000 metros cúbicos. La obra se completará con la restauración vegetal de todas estas superficies mediante el método de hidrosiembra. En total, se restaurarán 11 hectáreas de frentes rocosos, 19 hectáreas de explanadas o plataformas y unas ocho hectáreas de taludes.
Además de las tres fases principales, se incluyen otras actuaciones complementarias como la ejecución de una red de drenaje y tratamiento de escorrentías para proteger al arroyo de Balén y colocación de elementos de seguridad y balizamiento. El acto contó con la presencia del alcalde de Carucedo, Alfonso Fernández, y del presidente del Consejo Comarcal del Bierzo, Gerardo Álvarez Courel, entre otros representantes institucionales.
Nuevas restauraciones
Según avanzó el consejero, el proyecto se desarrollará a lo largo de 14 meses y servirá para dar el pistoletazo de salida a las actuaciones de restauración en la comarca del Bierzo, tras los 36 millones invertidos en la comarca de Laciana para regenerar el terreno de explotaciones a cielo abierto como Valdesegadas, Prégame, Feixolín, Fonfría y Nueva Julia.
En ese sentido, Suárez-Quiñones adelantó que la Junta destinará 70,6 millones de fondos europeos en los próximos meses para restaurar un total de 1.060 hectáreas en tres proyectos a desarrollarse en la Gran Corta de Fabero, en la zona de Torre del Bierzo y en el municipio de Igüeña. Los trabajos forman parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y son fruto del convenio firmado entre la Consejería de Fomento y Medio Ambiente y el Instituto de Transición Justa (ITJ) en noviembre de 2021.
Todas estas obras correrán a cargo de la empresa pública Tragsa y está previsto que comiencen en un plazo de un mes, señaló el consejero. La previsión es que estos trabajos de restauración sean capaces de crear unos 200 empleos directos.