El estudio ‘Demografía médica en Castilla y León’ presentado este lunes en Valladolid refleja un desigual reparto de facultativos que se ceba con El Bierzo, el área sanitaria de la Comunidad que refleja una peor tasa de médicos por habitante: 340 por cada 100.000 usuarios cuando Valladolid y Salamanca suman 555 y 536, respectivamente. La media autonómica está en 468, mientras la del conjunto de España se sitúa en torno a 400, según el informe elaborado por el Consejo de Colegios Oficiales Médicos de Castilla y León.
El estudio del Consejo recoge que Castilla y León cuenta con 1.195 médicos más en activo entre 2019 y 2024, a los que hay que sumar los 465 en formación MIR. Pero el aumento no es homogéneo, ya que Valladolid y Salamanca suman 555 y 536 médicos por 100.000 habitantes, respectivamente. Ambas están por encima de la media autonómica (468) y de España (en torno a 400). Un dato que es muy inferior en Ávila (392) y Segovia (399). Entre medias, están Zamora (413), Burgos (425), León (430), Palencia (444) y Soria (462). El área del Bierzo (que incluye también Laciana) está mucho peor que el resto, ya que esta tasa se queda en 340, frente a los 481 médicos en la de León.
En cuanto a los MIR, Valladolid (526) y Salamanca (388) concentran cerca de la mitad de la formación de la Comunidad, frente a los 26 en El Bierzo. “Una concentración excesiva tiene un efecto negativo en su formación, sin olvidar la importante labor de colaboración que realizan en la asistencia”, añadió.
Consultorios, difícil cobertura y fidelización de los MIR
Villarig reiteró que la diferencia de médicos entre provincias puede suponer desigualdades, al conllevar un “problema” de desarrollo profesional y en la homogeneidad de asistencia de los ciudadanos. Insistió en la necesidad de que los políticos, tanto del Gobierno central como de la Comunidad, tomen decisiones urgentes que en el caso de Castilla y León puede pasar por el excesivo número de consultorios médicos, que motiva que los médicos pasen la mayor parte de su jornada en los “caminos” en lugar de que el paciente se traslade hasta el lugar donde es atendido; la aprobación de un decreto ley para regular el establecimiento de medidas de incentivación en los puestos de difícil cobertura, tras cifrarlo en el 48 por ciento; la fidelización de los MIR en las provincias donde hay escasez de sanitarios y la aplicación de la movilidad obligatoria durante unos meses.
El presidente del Consejo consideró que serían soluciones temporales que, obviamente, deben contar con las organizaciones y los sindicatos médicos. “Son medidas impopulares y con un componente político importante porque la sanidad es una arma arrojadiza pero quien gobierna debe pensar en el bien común y tomar decisiones. La salud de la ciudadanía está por encima de todo y el diagnóstico y el tratamiento es exclusivo del colectivo médico”, sentenció.
En el análisis global, el Consejo de Colegios Oficiales Médicos de Castilla y León alertó este lunes en Valladolid de la “deficiente” distribución de médicos y urge a una reorganización de los recursos para no poner en peligro la viabilidad del sistema sanitario. No en vano, aseguró que ha habido un aumento “progresivo” de médicos colegiados en la Comunidad desde el año 2019, en concreto 2.079 al incluir los 1.195 jubilados, aunque este crecimiento no es homogéneo en todas provincias. Ante esta situación, la organización colegial apostó por la puesta en marcha de reformas urgentes, no solo a nivel autonómico. Lo “deseable” sería alcanzar un pacto global de la sanidad, algo que ve imposible, por lo que abogó por acuerdos en aspectos concretos entre las organizaciones profesionales, administración, partidos políticos y fuerzas sociales para que se pueda dar la mejor asistencia a toda la población de la forma más equitativa posible.
Con motivo de la presentación del nuevo estudio ‘Demografía médica en Castilla y León’, el presidente del Consejo de Colegios Oficiales Médicos de Castilla y León, José Luis Díaz Villarig, apuntó que el aumento de numero de facultativos en activo y en formación es mayor en el periodo 2022-2024 que en el periodo 2019-2022, reduciéndose la diferencia con las jubilaciones, que en los años siguientes irán decreciendo, como refleja la pirámide poblacional. Esto llevará a equiparar los activos y médicos en formación con los que se jubilan.
Por lo tanto, precisó, hay un cambio de una pirámide poblacional de pirámide invertida en 2019, a reloj de arena en 2024 y es muy probable que la del 2029 sea una pirámide con una base ancha. Es decir, habrá más médicos jóvenes que mayores. Díaz Villarig subrayó que, si no se toman las medidas “oportunas”, se puede llegar a una situación no deseada como el paro entre los médicos. “Es algo inasumible, que ya ocurrió hace 20 años cuando había 30.000 facultativos sin trabajo. No puede haber paro médico, después de, al menos, once años de formación”, aseveró.
Añadió que el incremento de médicos en activo ha supuesto la renovación de las plantillas, por lo que la escasez de médicos en algunas provincias, zonas o en servicios de un hospital no es por la supuesta falta de reposición sino por su “deficiente” distribución, la mala gestión (jornada laboral) y un mapa sanitario caduco, lo que requiere una reorganización y una reforma del sistema sanitario en “todos” sus aspectos.
En este sentido, el presidente del Colegio de Médicos de Segovia, Graciliano Estrada, apuntó que el índice de reposición de los especialistas a diez años, entre los que finalizan el MIR y los que se jubilan, se equilibrará. La previsión es que esté en positivo en la “inmensa mayoría” de especialidades, ya que peligra en Medicina Familiar en una Comunidad como Castilla y León, donde supone el 30% del total de los facultativos. No en vano, en 2019, esa tasa en Familia era del 0,48%, que ha pasado al 0,68% en 2022 y al 0,84 en 2024, lejos aún de la tasa ideal del 1,3%.
Facultades en Burgos y León
Preguntado por la decisión de la Junta de abrir nuevas facultades de Medicina en Burgos y León, el presidente del Consejo de Colegios Oficiales Médicos consideró que es un anuncio positivo para esas ciudades pero reclamó una regulación, a nivel nacional, de los médicos que se gradúan cada año.
De ahí que, en este apartado, también pidió una reorganización autonómica y estatal porque consideró que “no se pueden hacer médicos de manera indiscriminada”, tras denunciar que existen casi 50 facultades en España por que se corre el riesgo de que esos profesionales no puedan ejercer.