Confederación Miño-Sil busca una solución a la presa del Real de San Facundo que abastece a Bembibre

V. Silván/Ical

Los técnicos de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS) trasladaron al presidente de la junta vecinal de San Andrés de las Puentes, José Luis de la Torre, las cuatro posibles alternativas para solucionar la situación irregular de la presa del Real, ubicada en San Facundo (Torre del Bierzo) y que van desde una inversión de 1,4 millones de euros para su demolición total a los 2 millones que costaría su puesta en servicio con la retirada de los lodos.

El deficiente estado de esta infraestructura, que carece de los preceptivos planes de emergencia y de explotación que exige su catalogación como gran pesa, lleva siendo denunciada desde hace años, especialmente desde el vertido de lodos que ocasionó un desastre medioambiental en 2009 en el río Argutorio, con la muerte de cientos de truchas. Desde la junta vecinal de San Andrés exigen que se de un solución a su estado, al tiempo que critican la desidia de Bembibre –titular de la misma y de la que se abastece desde 1986-, cuya falta de inversiones y mantenimiento ha llevado a la actual situación de la presa.

Según explicó José Luis de la Torre, el informe realizado por la CHMS y que le fue presentado en una reunión la pasada semana contempla cuatro posibles soluciones, dependiendo de que se quiera mantener o no en servicio. Si se optase por dejarla fuera de servicio las alternativas serían una demolición total del muro y la retirada de lodos con un coste de 1,4 millones de euros o, por otro lado, abrir un hueco en el muro con las dimensión suficiente para que no haya problemas en caso de avenida y retirada de los lodos con un gasto de 1,3 millones, que conllevaría un coste añadido para realizar un seguimiento en los años siguientes.

Si la decisión fuera ponerla en servicio, desde la CHMS barajan la posibilidad de mantener la estructura actual y un vaciado de los lodos de la presa, que es la opción más cara con una inversión superior a los dos millones de euros, o acometer un recrecido de la presa en cinco metros y sellar los lodos con 1,7 millones de euros, con un aumento importante de su capacidad. En estas dos opciones estarían incluidos los 310.000 euros que costaría el plan de emergencia y el plan de explotación para legalizar su situación y conllevaría un gasto anual de 60.000 euros para su mantenimiento y seguimiento de la explotación.

Tanto desde la junta vecinal de San Andrés como los técnicos de la CHMS valoran como mejor opción su puesta en servicio a través del sellado de los lodos y recrecer la presa. A este respecto, De la Torre puntualizó que finalmente será una decisión política y que tendrá que ser asumida por el Ayuntamiento de Bembibre como titular, al tiempo que advirtió que seguirá exigiendo que se dé cuanto antes una solución al deficiente estado de la presa y que no dudará, sin marcarse un plazo, en acudir en los juzgados en caso necesario.

El pedáneo tampoco dudó en criticar la actitud de los diferentes alcaldes de Bembibre, que tenía a disposición fondos mineros ninguno de ellos haya realizado ninguna inversión para regularizar la presa del Real, cuando es el principal abastecimiento de esa localidad, a pesar de contar ya con una nueva traída desde el pantano de Bárcena que no se utiliza por sus enormes costes de mantenimiento, a pesar de haber supuesto una inversión de 11,6 millones de euros.

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