El Día del Bierzo mantuvo este domingo su esencia. Lo lúdico y lo reivindicativo se mezclaron en Ponferrada, que ejerce más que nunca cada 8 de septiembre de capital oficiosa de la comarca coincidiendo con sus fiestas patronales.

La ofrenda a la Virgen de la Encina le correspondió este año al Ayuntamiento de Benuza en un protagonismo rotatorio de los municipios bercianos por orden cronológico en el marco de la procesión que llenó de colorido varias calles del casco antiguo de Ponferrada.

Como es habitual, las principales reivindicaciones se basaron en ámbitos como la sanidad y las infraestructuras. Con la aspiración de la Denominación de Origen Rueda a comercializar vinos godello, este año también hubo alusiones a la defensa de esta variedad autóctona de las viñas bercianas.