La Consejería de Cultura y Turismo, el Consejo Comarcal del Bierzo, los ayuntamientos de Carucedo, Priaranza del Bierzo, Puente de Domingo Flórez, parte de sus juntas vecinales y el Instituto de Estudios Bercianos firmaron este viernes (con apenas unos días de retrraso sobre lo previsto) el protocolo para el nacimiento del consorcio que persigue una gestión unificada del Espacio Cultural de Las Médulas, reconocido por la Unesco hace 24 años.
El consejero, Javier Ortega, fue el encargado de suscribir el protocolo en representación de la Junta y remarcó que supone un avance en “el deseo, interés, ganas e ímpetu de una gestión integral que beneficie a todos los implicados” y una “suma de esfuerzos” a la que espera se adhiera también en un futuro el Ayuntamiento de Borrenes, que ha decidido quedar fuera del mismo cuando cuenta con elementos del paraje tan emblemáticos como el Mirador de Orellán.
“No se cierra la puerta a nadie. No es una buena decisión no sumarse y espero que cuando vayan viendo los frutos se sumarán”, dijo en tono conciliador para transmitir un mensaje de “absoluta normalidad”. “Trabajamos por el interés de los ciudadanos. Es un paso importante. El consorcio tiene que empezar a andar y los estatutos están muy avanzados”, añadió.
Ortega recordó que se plantea un modelo que, con el protagonismo de las entidades locales, el compromiso de liderazgo del Consejo Comarcal del Bierzo y el apoyo e impulso de la Junta“ logre combinar la protección del paraje con su uso, disfrute y aprovechamiento turístico.
El protocolo firmado en la Casa del Parque de Carucedo recoge la intención del Consejo Comarcal del Bierzo para ser la administración de adscripción del consorcio, como entidad integradora de todos los municipios que conforman el Espacio Cultural de Las Médulas y la voluntad de la Junta de aportar los medios personales y materiales necesarios para la puesta en marcha del nuevo ente consorciado.
Finalmente, se acuerda la creación de una Comisión de Seguimiento del Protocolo de Colaboración, que tiene dos encargos muy concretos a corto plazo: aprobar los estatutos del consorcio, que ya están muy avanzados, y diseñar y aprobar el proceso público para la designación de un gerente.