OncoBierzo: la revolución ciudadana contra la asistencia sanitaria en El Bierzo que explotó por falta de oncólogos

Valla publicitaria de OncoBierzo frente al Hospital El Bierzo de Ponferrada.

Elisabet Alba

El Bierzo —

La Sanidad Pública en El Bierzo está en cuidados intensivos. Después de meses, años, quizá décadas de una gestión por parte de la Junta de Castilla y León basada en políticas erráticas y promesas que no se cumplen, dejando morir por inanición el sistema asistencial en la comarca, este 2024 se ha marcado un nuevo y triste hito, el de tener que suspender la atención a pacientes oncológicos porque no había médicos especialistas. La noticia hizo saltar todas las alarmas, se recogieron hasta 35 reclamaciones de enfermos y familiares en un solo día y fue el germen para que naciera OncoBierzo, la primera asociación de pacientes oncológicos y acompañantes de la comarca, que se propone sacar a la calle a la sociedad berciana el domingo 1 de diciembre para revertir la situación.

“El cáncer no para” y es raro que una persona en El Bierzo no padezca la enfermedad en primera persona o lo viva de cerca a través de un familiar, un amigo o un conocido. Esa ha sido la chispa que ha encendido la mecha de una auténtica revolución social en la comarca berciana. Este medio ha querido hablar con los responsables de OncoBierzo para que nos cuenten qué hay detrás del éxito de este nuevo movimiento que se define a sí mismo como apolítico y al margen de la polémica.

“Nos han dicho que tenemos detrás un partido u otro. Incluso hay quien cree que es una conspiración mediática y que tenemos grandes medios detrás”, cuenta a elbierzo.elDiario.es uno de sus impulsores, José Miguel. En realidad, OncoBierzo son él y un puñado de personas más, anónimas, pacientes oncológicos o acompañantes de enfermos, familiares o amigos, a los que la problemática, desgraciadamente, los ha atravesado. “Había que hacer algo. Nadie explicaba nada”, el día que la dirección del Hospital El Bierzo de Ponferrada mandó volver a casa a los pacientes de cáncer sin pasarles consulta porque no había ningún médico para hacerlo y en vez de callarse se revolvieron.

La administración autonómica ha intentado atajar la crítica, sin éxito. Primero contratando en medio de la polémica a un profesional, periodista, “para sobreinformar” de nuevas promesas de la Junta en forma de anuncios de contrataciones, inversiones, obras y mejoras de todo tipo que, hasta el momento, no se han materializado. Después, este mismo miércoles, con la presentación de un 'plan de choque' sanitario confeccionado específicamente para El Bierzo, presentado a bombo y platillo tan solo cuatro días antes de la convocatoria de la movilización, en un último intento a la desesperada por desmovilizar a la sociedad berciana y que no proteste este domingo.

La pólvora

La asistencia sanitaria en El Bierzo lleva mucho tiempo de mal en peor. Consultorios cerrados, falta de médicos en Atención Primaria y también de especialistas en el Hospital El Bierzo, el centro hospitalario de referencia de la comarca, han sido hasta ahora pólvora mojada que, en momentos puntuales, era suficiente para molestar a un buen número de bercianos.

La de OncoBierzo no va a ser la primera protesta sanitaria que se haga en la comarca, ya ha habido otras multitudinarias antes, pero tiene algo de punto de inflexión y es el no rotundo a permitir que los pacientes oncológicos no tengan el tratamiento que necesitan.

En este momento, el servicio de consultas externas “está cubierto” de manera provisional con un oncólogo con plaza en el Hospital El Bierzo y médicos especialistas de otros hospitales de Castilla y León -de ciudades como León, Salamanca o Valladolid-, que se desplazan hasta la comarca berciana para pasar consulta y vuelven en el día a sus lugares de residencia.

Solo el taxi de un médico que se desplaza desde Salamanca, por poner un ejemplo, al Bierzo, cuesta 700 euros al día

Esta técnica de 'parcheado' del servicio es lo que la Junta de Castilla y León ha bautizado con el eufemismo de “asistencia en red”, sin que por ahora nadie de la Consejería de Sanidad se atreva a decir hasta cuándo va a durar. “Solo el taxi de un médico que se desplaza desde Salamanca, por poner un ejemplo, cuesta 700 euros al día, aparte del coste del profesional, el desgaste que le ocasionan los traslados y 'empeorar' la asistencia en el hospital en el que tiene su plaza”.

Alrededor de una treintena de médicos en toda Castilla y León se habrían ofrecido a ir a pasar consulta 'en red' una o dos veces por semana al Hospital El Bierzo. La Junta anunció hace semanas y lo ha vuelto a repetir ayer que ampliará de 4 a 6 las plazas de Oncología en el centro hospitalario berciano. Si bien la realidad es que el otro de los oncólogos con plaza lleva meses de baja médica, hay dos plazas sin cubrir porque sus titulares se acogieron a un concurso de traslados y de la convocatoria de las dos nuevas plazas a mayores nada se sabe.

La asistencia en planta hospitalaria es aún peor. Están pasando el servicio médicos internistas con el apoyo de un oncólogo de consultas externas. “Esa es la situación real. Nos dicen que no hay medios mientras que los medios se están externalizando”. Sin olvidar que El Bierzo ni siquiera cuenta con un servicio tan básico para los pacientes oncológicos como es el de radioterapia, que sigue siendo una entelequia que, desde la Junta, también han tratado de vestir de realidad recientemente a través de la licitación de la redacción de un proyecto. Los pacientes oncológicos de la comarca tienen que viajar a ciudades como León o Salamanca para recibir su tratamiento, o hacerlo en la sanidad privada, en una clínica con un concierto millonario. 

La pólvora, poco a poco, se secó por completo.

La mecha

La mecha se puso el día que el servicio colapsó. Pacientes oncológicos y familiares respondieron a la falta de médicos con 35 quejas en un solo día, y se multiplicaron hasta las 700 en dos semanas. “Ahí lo pararon”, los intentó parar la Junta, cuenta José Miguel. Entonces empezaron a recoger firmas. En papel ya han entregado 9.090, “y ya tenemos otras tantas”. En la plataforma online change.org suman cerca de 80.000 a la redacción de esta información.

Las tres personas que empezaron a moverse se convirtieron en un grupo de WhatsApp de 14 personas. “Unas van y otras vienen, por motivos personales. Somos pacientes oncológicos y acompañantes. No todos aguantan o se involucran de la misma manera por sus circunstancias”. Son anónimos y no quieren tener ningún protagonismo, “apolíticos”, gente con ganas de trabajar “de corazón”, sabedores de que defienden “una causa justa y necesaria”. “Nos constituimos como asociación para poder recoger dinero, porque hay cosas que pagar”. Todo El Bierzo, pueblo a pueblo, está lleno de carteles reivindicativos de la Sanidad Pública y, de cara a la protesta del domingo, “hacer una manifestación cuesta. Pero nada más”.

Pero OncoBierzo se ha convertido ya en mucho más. “Muchísima gente colabora con nosotros. En la primera pegada de carteles éramos 12, en la última más de 30. Estamos teniendo mucho apoyo”. Ha llegado un momento en el que “la gente sabe que hay que hacer algo”, porque en contra del dicho de que 'hasta que no te toca no lo ves', el cáncer, por desgracia, le toca de una u otra manera a casi todo el mundo.

Personalidades relevantes de la comarca del Bierzo y del panorama nacional han defendido también una Sanidad Pública y de calidad en las redes de OncoBierzo y muchas ventanas y balcones de la comarca lucen carteles o pancartas reclamando una atención digna. También la Plataforma en Defensa de la Sanidad del Bierzo y Laciana se ha sumado a la causa y animado a la sociedad a protestar. “Nos apoyamos porque el fin último de todos es el mismo, la mejora de la atención, pero somos independientes”.

Y así, de repente, una chispa encendió la mecha.

La explosión

La explosión social berciana no se hizo esperar ante un problema tan serio y que le puede tocar a cualquiera como es el cáncer. “Hoy necesito Oncólogo, si no hacéis nada mañana serán flores” o “Mañana a tu hija le van a diagnosticar cáncer y no tendrá Oncólogo”, son solo dos de los lemas de la asociación, que podrían ser, en realidad, la experiencia propia de muchos. “No sé por qué pero en El Bierzo es raro encontrar a alguien que no tiene cáncer. Él o ella, algún familiar o algún amigo o conocido, una persona cercana, de su entorno”. Pero la asistencia, “desde hace años es dantesca. Llegar a que te den quimio y que te manden a casa”.

El movimiento ha adquirido tal magnitud que la Junta de Castilla y León los llamó varias veces para sentarse con ellos y regalarles palabras bonitas. “Cuando fuimos a Valladolid”, el 15 de octubre, “nos prometieron un plan de choque para antes de Navidad”. Iba a estar “en unas semanas”, pero lo presentaron casi un mes y medio después, cuatro días antes de la manifestación convocada para este domingo. En ese encuentro nadie puso plazos. OncoBierzo no lo hizo porque “lo que está claro es que el cáncer no para”. La administración autonómica sigue sin darlos.

Lo que sí les trasladaron desde la asociación de pacientes oncológicos y acompañantes a la Junta fueron dos cosas. La primera “que se pongan a trabajar y nosotros a lo nuestro”. Y, la segunda, que si querían de verdad conocer cómo está el servicio que fuesen un día al Hospital El Bierzo a visitar la planta y consultas externas de Oncología con ellos. “¡Qué van a venir! Hay retrasos para hacer pruebas, en los diagnósticos, en los tratamientos... Hay una persona que ha estado un mes y medio hospitalizado hasta que le diagnosticaron que lo que tenía era un cáncer”, lamenta José Miguel en boca de los afectados.

El mayor cambio que ha habido desde que empezó OncoBierzo ha sido de cara a la opinión pública. “Antes había cerrojo informativo. Ahora hay sobreinformación”, porque la Junta sí que se apresuró en este tiempo a contratar a un profesional, pero del Periodismo. Pero eso no ha sido suficiente para cambiar los ánimos en los bercianos. “La gente tiene la sensación de que si viviese en otra parte estarían mejor atendidos” y hay quienes les preguntan si sería mejor empadronarse en otro sitio fuera del Bierzo, “en domicilios de familiares que viven en León o en cualquier otra parte, y eso no puede ser”.

La gente tiene la sensación de que si viviese en otra parte estarían mejor atendidos

El argumento mil y una veces repetido por parte de la Junta de que hay falta de especialistas y de que es un problema estructural del conjunto del país no los convence. “La última vez que convocaron plazas solo una era para Oncología” y “cada día las clínicas privadas anuncian nuevos fichajes de médicos, apertura de consultas o pruebas novedosas. No puede ser que para unos haya y para otros no”. Es una cuestión de voluntad, o de falta de voluntad política.

Lo que tienen claro es que “cuando nos ponen un palo en la rueda, apartamos el palo y seguimos”, porque “queremos que los pacientes estén bien atendidos”. Por eso, el domingo 1 de diciembre, a las 11.30 horas, están convocados todos los bercianos a concentrarse en la plaza de Julio Lazúrtegui de Ponferrada y marchar hasta la plaza del Ayuntamiento de la capital del Bierzo, recorriendo todo el centro de la ciudad para exigir, de una vez por todas, “un servicio médico de calidad en la Sanidad Pública”.

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