Toreno rechaza por unanimidad la implantación de parques eólicos en la Sierra de Gistredo

El Pleno del Ayuntamiento de Toreno ha rechazado por unanimidad la concesión de permisos municipales para la implantación de macroparques eólicos en montes comunales. El pronunciamiento político se produce a raíz de una moción urgente presentada por Podemos para mostrar su rechazo a los proyectos de esta naturaleza anunciados para la Sierra de Gistredo. El texto también pide al Ministerio para la Transición Ecológica que paralice cualquier licencia relacionada con la instalación de energías renovables hasta que no se fije una estrategia nacional en este ámbito.

Se trata de los dos acuerdos con los que termina la moción presentada por Podemos como respuesta a la publicación el pasado 7 de mayo en el BOE (Boletín Oficial del Estado) del procedimiento por el que se somete a información pública por parte de la Subdelegación del Gobierno en León la solicitud de autorización administrativa previa y el estudio de impacto ambiental de los parques eólicos 'Acario' y 'Tureno', ambos ubicados en el entorno de la Sierra de Gistredo. La petición parte de la empresa Green Capital Energy, uno de los gigantes del sector.

Se da la circunstancia de que esta iniciativa se presenta para la misma zona dos décadas después del primer proyecto de estas características que fue luego anulado por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León tras una batalla administrativa y judicial de 14 años liderada por la Plataforma para la Defensa de la Sierra de Gistredo.

“La instalación de varias hileras de aerogeneradores de 180 m. de altitud generaría un impacto muy negativo en la Sierra de Gistredo”, reza la moción presentada al Pleno del Ayuntamiento de Toreno por Podemos, que alerta de cómo “grandes empresas administradas por fondos de inversión sin vinculación alguna con el territorio están presentando una batería de proyectos por toda la Cordillera Cantábrica y los territorios de la llamada España Vaciada”.

“Somos conscientes de que el cambio de modelo energético pasa por las energías renovables, pero este no debe hacerse de este un modo desordenado y mucho menos dirigido por grandes empresas, más interesadas por la captación de subvenciones europeas que por el desarrollo endógeno del territorio”, añade la formación morada para advertir de que los macroparques eólicos “no suponen ningún aporte significativo en términos de empleo para las zonas donde se instalan”. Al mismo tiempo, muestra su preocupación por el hecho de que “las cuantiosas remuneraciones que las empresas prometen a las Juntas Vecinales por la instalación de los parques eólicos en los montes de uso comunal pueda derivar en una fuente de corruptelas que deterioren la convivencia entre vecinos”.