El Castillo de los Templarios de Ponferrada vuelve a tener puente levadizo tras la finalización de las obras de reforma en el acceso a la fortaleza, adjudicadas a la empresa Trycsa por 65.800 euros procedentes de los remanentes de tesorería de anteriores ejercicios. El alcalde de la ciudad, Olegario Ramón, y el arquitecto director de los trabajos, Fernando Cobos, visitaron este jueves los trabajos y asistieron al primer alzado de la nueva estructura.
Al respecto, Ramón explicó que la actuación se inició en 2019, con el objetivo de retirar el “enjambre de vigas metálicas” que se instaló de manera provisional en enero de 2017 para solucionar los problemas estructurales en el arco de entrada al Castillo. Con el visto bueno de la Dirección General de Patrimonio, al tratarse de un Bien de Interés Cultural (BIC), los trabajos arrancaron el pasado mes de abril. Al respecto, el regidor recalcó que las obras sólo implicaron el cierre de la fortaleza durante 15 días en los meses de noviembre y diciembre.
Por su parte, Cobos señaló que la reparación del arco y el refuerzo de la estructura de madera que da acceso al interior del recinto permitirá el paso de furgonetas pequeñas de hasta 3.000 kilos para suministrar al edificio. “El Castillo siempre tuvo un puente levadizo”, recordó el arquitecto responsable de las obras, que apuntó que existe una estancia semienterrada a la entrada de la fortaleza para alojar los contrapesos que permiten alzar el puente y que dispone de una puerta para salir al foso cuando el puente está levantado.
En ese sentido, el objetivo de la actuación era “recuperar el funcionamiento original del puente levadizo en la Edad Media”, aseguró Cobos, que señaló que los trabajos estuvieron condicionados por el hecho de que este puente es la única puerta de acceso a la fortaleza, a la espera de que las obras que se llevan a cabo en la zona del Castillo Viejo permitan abrir una segunda entrada al recinto.
Al respecto, el alcalde señaló que estos trabajos de restauración en la parte más antigua de la fortaleza, que cuentan con un presupuesto de 1,6 millones, están “próximos a rematar” y apuntó que en la jornada de este jueves la empresa encargada de los trabajos está procediendo a la retirada de las grúas. Ramón también recordó que el Castillo será el centro de monitorización del proyecto de protección del patrimonio impulsado por el Ayuntamiento y dotado con 300.000 euros de presupuesto.