Promonumenta adecenta la estación de tren del Ponfeblino en Palacios del Sil

En apoyo al Ayuntamiento de Palacios del Sil, la asociación Promonumenta ha impulsado este fin de semana una hacendera en la estación del ferrocarril del Ponfeblino de esta localidad berciana del Alto Sil a la que asistieron numerosos socios y también se añadieron personas interesadas por la actividad.

El número de socios asistentes a los trabajos rondaron la veintena y todos ellos arrimaron el hombro con los correspondientes pertrechos para acometer un trabajo que habría de consistir en limpiar de zarzas y mala vegetación tanto la estación como un tramo de vías a ambos lados de la misma, ya que en la actualidad se encontraba en muy mal estado todo el conjunto. El resultado fue muy satisfactorio de modo que se pudieron quedar a la vista la mayoría de los valisosos elementos de esta antigua infraestructura ferroviaria.

Esta actuación se encuadra dentro del apoyo que Promonumenta viene prestando a la recuperación para uso turístico del antiguo ferrocarril Ponferrada-Villablino, el llamado Ponfeblino. De hecho, anteriormente ya se había realizado otra hacendera en la estación de Cubillos del Sil.

Al término de los trabajos, se le hizo entrega al alcalde de la localidad, Roberto Fernández, de una revista del último número de las que edita la asociación, después de que además el regidor participara en la hacendera con un tractor-remolque para llevar la maleza desbrozada.

Hay que recordar que el edificio de la estación de Palacios del Sil se encuentra en la Lista Roja de ‘Hispania Nostra’ por el mal estado de este elemento patrimonial. Existen actualmente un proyecto público y también privado para rescatar las vías del trayecto ferroviario con el fin de recuperar el material histórico del ferrocarril y sus talleres, con el objetivo final de que se pueda poner nuevamente en marcha este ferrocarril para ahora darle un nuevo uso como tren turístico, en ayuda a la dinamización económica de los pueblos del trayecto entre las capitales del Bierzo y de la comarca de Laciana, tan castigados por el cierre de la minería y la térmicas, frenando de este modo su despoblación.