Las tormentas de este miércoles enfangan las aguas del Cúa a su paso por Cacabelos

El río Cúa a su paso por Cacabelos, completamente turbio por la intensa tormenta. / César Sánchez / ICAL

El Bierzo 'cambió' de estación de un momento a otro durante la tarde de la pasada jornada del miércoles, causando destrozos en sus tierras, en sus productos del campo y en las propias calles de Ponferrada, como de otros puntos de la comarca del Bierzo.

Sin embargo, este viernes han comenzado a salir a la luz todas las consecuencias de las fuertes tormentas y de las 'pedradas' de granizo que durante el pasado jueves, llegaron al Bierzo, y por un buen rato.

Así, el río Cúa a su paso por Cacabelos ha amanecido con las aguas turbias, removidas, dejando a un lado la capacidad cristalina del río, para hacer 'protagonista' al barro que ha sido arrastrado a consecuencia de las fuertes lluvias por tormenta.

En otro orden de cosas, las intensas tormentas de granizo caídas en la tarde de ayer en la comarca del Bierzo dañaron seriamente los cultivos de pera y manzana que se extienden por diferentes localidades. “Es un completo desastre, dan ganas de echarse a llorar”, reconoció el presidente de la Asociación Berciana de Agricultores (ABA), Daniel Franco.

Con piedras de más de cinco centímetros de diámetro, un tamaño similar al de una pelota de golf, el impacto en los frutos los deja completamente rotos, cuando faltaba menos de una semana para la recolección. “Ya casi la teníamos en la mano”, lamenta Franco.

En el ámbito vitivinícola, la tormenta de granizo que descargó principalmente sobre la ciudad de Ponferrada también provocó algunos daños en los viñedos de la localidad de San Lorenzo y en los que se extienden a los pies del monte Pajariel. En una “tarde complicada”, según reconoció el presidente de la Denominación de Origen (DO) Bierzo, Adelino Pérez, las principales afecciones se concentraron en las localidades de Arganza, Quilós y Magaz, donde la piedra provocó “bastantes daños”.

Etiquetas
stats