El acalde de Ponferrada, Marco Morala, avanzó este jueves que el equipo de Gobierno comenzará la próxima semana la ronda de encuentros con sectores económicos y asociaciones para modificar la Zona de Bajas Emisiones y ordenar el acceso a las zonas peatonales, con el objetivo de que “no sea perjudicial para la vida de la ciudad y el desarrollo económico”.
En cuanto al acceso a las distintas zonas peatonales, se llevará a cabo un “necesario retraso” de unos meses en la entrada en vigor de la ordenanza que afectará tanto a la zona del Casco Antiguo como a la zona centro. “Existe un elevado volumen de solicitudes de autorizaciones de acceso sin resolver y en estas condiciones no es posible regular el acceso sin crear desigualdades de trato a los ponferradinos”, afirmó Morala, quien detalló que las solicitudes “se tramitarán de modo que cuando se aplique la regulación todo el mundo tenga claro cómo se produce”.
En relación con la Zona de Bajas Emisiones, el regidor calificó de “contraproducente” el planteamiento del equipo de Gobierno anterior, por lo que apuntó que la futura Concejalía de fondos europeos trabaja en el expediente con el objetivo de implantar “el cambio comprometido y que los ciudadanos han demandado al votar”.
“Un equipo de trabajo municipal está colaborando para darle solución al problema creado por el anterior equipo de Gobierno, con una zona de máximos y una regulación ajena a las necesidades de comerciantes, profesionales, autónomos y vecinos”, concluyó Marco Morala.
El acuerdo de gobierno de Ponferrada entre PP, Vox y Coalición por el Bierzo incluye la modificación de la propuesta socialista y llevar al Casco Antiguo, zona sin problemas de emisiones, la restricción del tráfico obligada por leyes nacional y europa.