La Junta aumenta el operativo contra incendios forestales en León pero sin drones, medida estrella de otros años
El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, presentó otro año más en León el operativo de incendios de la Junta para la época de riesgo más elevado, tiempo oficial de “riesgo alto” que este año se incrementa un mes para extenderse del 12 de junio al 12 de octubre.
Fue esta la principal novedad destacada por el consejero, quien también remarcó junto al nuevos consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, y la Comisión General de Coordinación Territorial, que el número de efectivos de personal aumenta hasta los 4.715, de los cuales un 80% son personal público, frente a los 4.540 del año 2022, el peor en décadas por siniestros, superficie quemada, desplazamientos de la población e incluso fallecidos.
Sin embargo, frente al incremento de todos los medios materiales también que Suárez-Quiñones relató, admitió que una medida muy destacada otros años como es el uso de drones para detectar conatos e incendios se queda este año prácticamente en nada, apenas “uno a disposición en Rabanal” del Camino.
En los cinco primeros meses del año el número de incendios registrados en la Comunidad ascendió a 532, lo que supone un 6% menos que la media de la última década, aunque se registró un aumento de los conatos, y de las 20.84 hectáreas que ardieron un total de 283 fueron de superficie arbolada; es decir, un 41% menos que en último decenio, y en ese periodo no se produjo ningún gran incendio forestal.
Marzo fue el segundo más cálido del siglo XXI y el segundo con menos lluvia y tras un abril “extremadamente seco”, con un déficit de un 80 por ciento de agua, mayo se despidió con con temperaturas elevadas y tormentas que consiguieron moderar la sequía acumulada en primavera, pero no lo suficiente, por lo que aludió a un “panorama de sequedad relevante”.
Entre las novedades que el consejero destacó para una campaña que será atendida con 325 autobombas -30 renovadas- y un despliegue de nuevas cámaras de vigilancia en Ávila (20 nuevas) y Salamanca (21/, además de un incremento de las existentes en Zamora, con siete más, se encuentra la calidad de los cuadros de mando, con 40 incorporaciones este año, y la creación de la figura de los técnicos especialistas en análisis de planificación y comportamientos del fuego.
Con un total de 209 cuadrillas, también se presenta como novedad la incorporación de unidades de brigada y autobomba de doble cabina, acompañadas de una ‘pick up’ y su correspondiente personal en las provincias de Ávila, León, Salamanca y Zamora. Además, habrá cinco cuadrillas nocturnas más en Burgos, Palencia, Segovia Soria y Valladolid, de forma que pasan de ser 11 a 16. Respecto a la base de helicópteros de lucha contra incendios de Oterico, en el municipio leonés de Riello, Suárez-Quiñones comentó que no estará lista para la presente campaña sino que se espera para la siguiente de 2024. Se trata de una base que ha de sustituir a la actual de Camposagrado, porque ésta interfiere en el aeropuerto civil de León.
Recomendaciones
El 92% de los incendios podrían evitarse. Así lo recordó hoy el consejero, antes de repasar las habituales recomendaciones a la población para “extremar las precauciones” y “cumplir las prevenciones que dictan las autoridades sobre el uso del territorio”, especialmente en verano.
“El operativo es autonómico, distribuido estratégicamente, lo que permite acometer la concentración de medios donde es preciso y colaborar con otras comunidades autónomas o con Portugal”, señaló tras recordar que el pasado año se registraron 17 grandes incendios forestales en Castilla y León.
