Redacción ILEÓN

La niebla y el frío dejan una estampa puramente invernal y prenavideña en la comarca del Páramo leonés donde este domingo han amanecido bajo una cencellada. Las bajas temperaturas han hecho que se congelen las gotitas de agua suspendidas en el ambiente dejando kilómetros y kilómetros pintados de blanco.

Los vecinos del Páramo pasean este último domingo de otoño, antes de la entrada oficial del invierno el próximo jueves 22 de diciembre, entre escarcha. Todo a su alrededor está helado. Los campos, los árboles, incluso los bancos del mobiliario urbano.

Desde Santa María del Páramo hasta el límite con la provincia de Zamora, todo es blanco. Ni asoma el sol ni se superan los cero grados. Aunque la provincia de León no está en alerta por niebla esta jornada, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las brumas pueden ser localmente persistentes.

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