Cabrera Despierta reclama la declaración BIC de los canales romanos de Las Médulas

La Asocición Cabrera Despierta reclama la declaración de Bien de Interés Cultural los cientos de kilómetros de canales romanos que se usaron para surtir de agua la explotación aurífera de Las Médulas y poder así protegerlos ante la invasión de macroparques eólicos y macrogranjas solares.
Cabrera Despierta recuerda que este domingo 4 de diciembre “se conmemora el 25.º aniversario de la declaración del paraje de Las Médulas como Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco” y aprovechando esta onomástica ha registrado “una petición ante la Dirección General de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León para que se inicie la incoación de manera urgente e inmediata de un expediente de declaración de los canales romanos de Las Médulas como Bien de Interés Cultural (BIC).
Los cabreireses recuerdan a la Junta que“la incoación de un expediente de estas características necesita de documentación que describa e identifique suficientemente el bien y que sirva como propuesta de delimitación Esta documentación ya existe y se encuentra publicada y disponible libremente en diversos ámbitos, por lo que no supondría ningún inconveniente a la hora de realizar la incoación del expediente de declaración BIC”.
“En estos momentos existe una grave amenaza sobre este importante conjunto patrimonial único en el mundo”, advierten. “Los diversos parques eólicos proyectados (Anemide, Alto Cabrera,Lardeiras Corporales, Torneros, etc) suponen la total desvirtuación de un paisaje cultural excepcional, cuando no la destrucción directa de evidencias arqueológicas irrepetibles, puesto que, tanto el trazado de las pistas de acceso, como el emplazamiento de aerogeneradores, torres de distribución eléctrica y construcciones auxiliares, dañarán gravemente y de forma irreversible un patrimonio histórico y arqueológico de varios milenios de antigüedad para garantizar a priori la adecuada protección”.
La declaración de la Unesco olvidó los canales cabreireses
La declaración en 1997 de la explotación aurífera romana de Las Médulas como Patrimonio de la Humanidad supuso un merecido reconocimiento a la mayor explotación minera del Mundo Antiguo, explican los miembros de Cabrera Despierta en un comunicado.
“Sin embargo, esta declaración pasó por alto el conjunto de esta magnífica obra de ingeniería, centrándose únicamente en el singular paraje de picachos rojos, residuos de los trabajos de extracción. De este modo, quedaron al margen los canales de abastecimiento de agua, imprescindibles para poder realizar el derrumbe de la montaña, sistema que el naturalista romano Plinio denomina arrugia, y permitir la recuperación del oro en los canales de lavado. En ese momento, parece ser que los canales fueron considerados como una obra menor y se encontraban muy escasamente documentados, con la carencia absoluta de una topografía adecuada, a pesar de ser ampliamente conocidos por los naturales de la zona”, critica Cabrera Despierta.
No es hasta el año 2004 cuando se publica la primera cartografía de detalle, que arroja ya la sorprendente cifra de 600 kilómetros de canales, sucesivamente ampliados con nuevas investigaciones y hallazgos en el 2008 y 2017, por lo que se alcanzan ya los 700 kilómetros de longitud. “Una red de canales que rivaliza en dimensiones e ingeniería con el abastecimiento a la propia ciudad de Roma, capital del Imperio”, señalan.
“Pero Las Médulas y sus canales no son el único patrimonio de minería aurífera romana que se encuentra en la zona de los Montes Aquilianos-Sierra del Teleno. En este territorio se han inventariado ya más de 200 explotaciones mineras romanas que pueden catalogarse como el mayor conjunto mundial de minería aurífera romana, y que también se encuentra amenazado por el despliegue de proyectos de renovables en la zona”, termina el comunicado.