El berciano Blanco Balín acepta prisión por participar en el pago de una comisión de 25 millones en la Gürtel de Arganda

El penúltimo juicio del caso Gürtel ha comenzado este lunes en la Audiencia Nacional, centrado en las presuntas adjudicaciones irregulares del Ayuntamiento de Arganda del Rey (Madrid) hace más de dos décadas bajo gobiernos del Partido Popular (PP). Y en una causa más de esta trama, entre la veintena de acusados, vuelve a destacar la figura del abogado berciano Ramón Blanco Balín, señalado por la Fiscalía como el cerebro financiero de la trama corrupta, tal y como ha zanjado ya otras sentencias previas.
En este nuevo caso, Blanco Balín vuelve a pactar con la Fiscalía Anticorrupción una pena algo inferior a dos años de prisión en el caso en el que el abogado, junto con Francisco Correa y Pablo Crespo, habría acordado con el exalcalde Ginés López y el exconcejal Benjamín Martín Vasco el cobro de una comisión de al menos 25 millones de euros. Esta suma fue abonada por el constructor Fernando Martín, expresidente de Martinsa y del Real Madrid, a cambio de la adjudicación de parcelas a su empresa, destaca eldiario.es.
En el inicio del juicio, 20 de los 21 acusados han alcanzado un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, reconociendo los hechos a cambio de una reducción en las penas solicitadas. Entre los delitos imputados se encuentran prevaricación, fraude, cohecho, falsedad documental, delitos contra la hacienda pública, insolvencia punible y malversación.
El letrado asume de este modo un delito de cohecho continuado, con una pena de un año y dos meses de prisión, así como seis meses más por delito de fraude a las administraciones públicas, además de las multas correspondientes. Se le aplican dos atenuantes, una por confesión y otra por dilaciones indebidas, para la mencionada rebaja de la pena.

Ramón Blanco Balín, nacido en Bembibre en 1953, es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid. Ha ocupado cargos relevantes en diversas empresas, incluyendo Repsol, Gas Natural y Enagás, nombrado como consejero por designación del entonces Gobierno del líder del PP, José María Aznar, con quien fue compañero de promoción de la Inspección de Hacienda.
Sin embargo, su implicación en la trama Gürtel lo ha situado en el centro de las investigaciones, siendo considerado por la policía como una pieza clave en el engranaje de la organización para el blanqueo de dinero y la evasión fiscal.
Condenas precedentes
Hasta el momento, Blanco Balín ya fue condenado en la pieza separada 'Valencia' de la misma trama a 3 penas de 1 año de prisión y 3 multas que sumaban 1,3 millones de euros por delitos de fraude contra la Hacienda Pública en impuesto de sociedades e IRPF. En el año 2020 la Audiencia Nacional condenó a los cabecillas de la trama Gürtel que organizaron la visita del Papa a Valencia por la adjudicación ilegal al grupo de Francisco Correa del contrato de suministro de pantallas, sonido y megafonía para la visita del papa Benedicto XVI a Valencia con motivo del V Encuentro de la Familia, celebrado en Valencia los días 7, 8 y 9 de julio del año 2006. Aquella vista se saldó con penas de hasta 15 años de cárcel para 19 de los 23 acusados, entre lo que se encontraban los leoneses José Luis Martínez Parra y de nuevo Ramón Blanco Balín, una condena que ratificó el Tribunal Supremo. Martínez Parra falleció en agosto del pasado 2024.
Nuevamente en 2022 la Audiencia Nacional condenó a Blanco Balín a dos años y nueve meses por la trama Gürtel de Boadilla del Monte (Madrid), acompañado en el banquillo de los acusados por los también leoneses José Luis Ulibarri, el empresario, y José Luis Martínez Parra, con año y medio y dos años de cárcel para cada uno. Un proceso en el que nuevamente el PP fue condenado como partícipe a título lucrativo de los delitos cometidos por la trama de corrupción Gürtel al beneficiarse por la actuación de la red de corrupción que dirigía Francisco Correa.