CCOO se suma a las críticas por el “abandono” de la residencia de mayores de Ponferrada y propone construir otra
La Federación Provincial de Pensionistas y Jubilados de CCOO denunció este miércoles el estado de “abandono” de la residencia de mayores de Ponferrada, perteneciente a la Junta de Castilla y León. Reclama la dimisión de la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco.
Se suman así al llamamiento hecho desde partidos como el PSOE y la UPL, y exigen que se acabe con las privatizaciones, se invierta y se atienda de forma adecuada estos espacios, especialmente en una comarca como el Bierzo, con población envejecida, y donde son fundamentales. Los leonesistas llevaron sus críticas a las Cortes de Castilla y León, donde la consejera de Familia se remitió a la ejecución de obras de modernización para la reforma del tejado, la adaptación de la reforma energética y el arreglo de los cinco ascensores del centro.
Lamenta el “pésimo estado de esta residencia, cuyas instalaciones están cada vez más deterioradas, con ascensores que no funcionan o climatización deficiente, entre otras cosas”.
El sindicato afirma que a la carencia de residencias se suma este abandono por parte de la consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades. “Dejar deteriorarse los centros públicos es de siempre una estrategia del PP cuyo paradigma de funcionamiento es la privatización y que todo lo privado es mejor. Es una forma de empujar a la población hacia los servicios privados”, denuncian, y reclaman la construcción de una nueva residencia.
Recuerdan que el envejecimiento de la comarca, y de toda la provincia, es cada vez “más alarmante” por lo que los servicios residenciales son “cada vez más fundamentales”. “¿Cómo es posible que se presenten para ser elegidos para gestionar lo público si sus políticas lo único que haces es no invertir y descuidar lo público para incentivar los privado y convertir en negocio las necesidades de nuestros mayores?”, pregunta el sindicato.
Se muestran “indignados” ante esta forma de proceder, que obliga a las familias a tener que acudir a centros privados. Política, dicen, que se extiende a otros servicios, como la sanidad, “con la prometida unidad de radioterapia que no llega, la educación, con el cierre de unidades o el resto de servicios sociales”.
“Las personas mayores somos el colectivo más numeroso de esta comunidad, hemos aportado nuestro trabajo y esfuerzo en construir y mejorar la sociedad y es indigno que cuanto más necesitamos atención y ayuda la Junta de Castilla y León no tenga en buenas condiciones los centros de mayores”, lamentan.
