La recreación de la revuelta de los Irmandiños y la toma del Castillo de Ponferrada reúne a miles de asistentes

Recreación de la revuelta de los Irmandiños y la toma del Castillo de Ponferrada.

Agencia EFE

Los Irmandiños han regresado a Ponferrada, armados como lo hicieron en el siglo XV cuando su revuelta fue un acontecimiento histórico en Galicia y en esta parte del Bierzo, recreando ahora la toma del Castillo, un acto que cada año atrae a miles de turistas y propios.

El Ayuntamiento de Ponferrada y la Asociación Caballeros de Ulver organizan el evento que el año pasado sumó a 5.000 espectadores y que este año, para sortear los posibles “tapones” a las puertas de la fortaleza, se ha confeccionado en dos horarios, traduciéndose, de nuevo, en miles de observadores.

El teniente de alcalde, Iván Alonso, destaca de esta representación su carácter turístico y atractivo que abre las puertas a eventos cada fin de semana, y que utiliza la fortaleza, la joya de la corona en esta materia en Ponferrada.

Unos 60 miembros de la asociación organizadora, de los 80 con los que cuenta hoy, se han dado cita en los aledaños del castillo para sacar sus espadas y otras armas y comenzar su revuelta.

En Ponferrada, recuerda su presidente, Gonzalo González, fue donde se paró esa revuelta que había tomado las fortalezas gallegas y también algunas bercianas.

La capital del Bierzo fue escenario de la traición de uno de sus líderes y acabó aquel movimiento que puebla los libros de historia.

De él habló, antes de la recreación, la historiadora Margarita Torres, con una conferencia, días antes, en la que poner contexto a esta recreación con la que, según González, se le aporta otra mirada a la fortaleza “de la que siempre se habla como templaria, encabezándolo todo con la Orden del Temple”.

El tiempo respetó la actividad hasta el punto de contar con sol, pese a la ligera lluvia mañanera, en la que participaron también miembros de grupos recreacionistas de Galicia, de Asturias y de Castilla y León.

Dentro del castillo, los Irmandiños tenían su campamento preparado que, durante la mañana, pudieron visitar los turistas y curiosos.

Un control de salvoconductos en la Puerta del Reloj llamaba la atención durante la mañana, en la que los soldados irmandiños fueron paseando por el casco antiguo, manifestando su presencia que acabó en un estallido en la batalla extramuros primero y, una vez que todos los asistentes se colocaron dentro de la fortaleza continuó dentro.

Pero el encuentro continúa este domingo con la exhibición de tiro con arco en el patio del palacio, que dará paso al campeonato de liza a mediodía.

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