La coalición Podemos-Izquierda Unida de la comarca de Laciana ha mostrado su rechazo frontal a las pretensiones del consorcio del Ponfeblino de abrirse a negociar con Repsol un inversión de esta multinacional en el ansiado tren a cambio de que se le autorice la construcción de hasta tres macroparques eólicos en la Sierra de Gistredo y el Alto Sil.
Un proyecto al que se opone el Ayuntamiento más afectado, el de Páramo del Sil, varios de sus pueblos y numerosas organizaciones, sobre todo por afectar de lleno al santuario del urogallo, donde quedan las últimas decenas de ejemplares en España. Y un proyecto que, sin embargo, han apoyado públicamente otros municipios bercianos, todos ellos también gobernados por el PSOE, como Bembibre, Igüeña y Noceda del Bierzo, por las millonarias inversiones para su desarrollo.
En este contexto, Podemos-IU se pronuncia por boca de su portavoz del Grupo Municipal en Villablino, Silvia Mozo, manifestando una postura firme y contraria al macroparque, poniéndose del lado del Ayuntamiento de Páramo del Sil, que según afirma, “ha sabido anteponer los intereses de la ciudadanía y el medio ambiente a los de una multinacional”.
Aseguran no comprender como desde instituciones públicas de Laciana y El Bierzo se pueden avalar proyectos como este, que solo generan perjuicios sociales y ambientales. Por eso piden al Consorcio del Ponfeblino que abandonen toda posible negociación con Repsol y “defiendan nuestro patrimonio natural y no vendan nuestros territorios por un puñado de euros”.
Con carácter general, hacen un balance muy negativo de los grandes parques eólicos en territorios de tanta calidad medioambiental como la Sierra de Gistredo. Los cuales, dicen, “en lugar de aportar beneficios, únicamente traen explotación y degradación, dejando a comunidades enteras sufriendo los daños durante décadas, sin las supuestas ventajas que prometen”.
Por so aseguran que mantendrán su postura de oposición firme “a que se antepongan los intereses privados de estas macroempresas especulativas cuyo único objetivo es maximizar sus beneficios a costa de nuestro futuro”. Estando al lado de todos lo que reclaman “un modelo de desarrollo sostenible, respetuoso con el medio ambiente y que ponga a las personas en el centro” y no para favorecer “el ansía especulativa de las grandes multinacionales”, concluyen.
También la UPL en El Bierzo se ha posicionado en contra de las pretensiones de Repsol, mientras las principales instituciones, como la Junta de Castilla y León, el Consejo Comarcal de El Bierzo o la Diputación, en su mayor parte se sitúan en medio de ambos bandos, pidiendo la defensa de los recursos naturales pero conjugándolo con las posibilidades de desarrollo de zonas, por otra parte, muy dañadas económicas tras el cierre sobre todo de la minería del carbón. Eso sí, el portavoz de la Junta, al menos, ha afeado a Repsol que condicione sus posibles inversiones en infraestructuras como la recuperación turística del viejo tren minero Ponfeblino a conseguir todos los parabienes, los cuales los debe otorgar o no el Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico.