La Junta desconoce todavía si protegerá algo de la térmica de Compostilla y el qué
La Junta de Castilla y León todavía no sabe si protegerá algo de la antigua central térmica de Compostilla y el qué y deja en manos de “los técnicos” el estudio y valoración del estado 'patrimonial' de sus torres, que iban a ser derribadas el pasado 1 de diciembre y que la administración autonómica paralizó in extremis con la excusa de valorar si podrían a llegar a ser consideradas Bien de Interés Cultural (BIC).
El propio portavoz del Gobierno autonómico, Carlos Fernández Carriedo, reconoció en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que la empresa Endesa, que llevaba años llevando a cabo las labores de desmantelamiento de la inactiva central, había interpuesto recurso de alzada por su decisión y que, incluso, habrían sido ya admitida “en parte”, sin dar ningún detalle. “Vamos a ir viendo cómo están las torres”, algunas ya llevaban hasta tres meses desmontándose por dentro, “y tomando decisiones”, subrayó.
A preguntas efectuadas por este medio de en qué situación quedaría el resto de la superficie de la antigua central de carbón, el portavoz ha asegurado que, de declararse BIC alguna torre, “no obstaculiza en modo alguno que pueda seguir teniendo el uso de suelo industrial que estaba previsto inicialmente”. Y añadió, “lo que afecta a las torres es un espacio más limitado de lo que fue Endesa, en la medida que el resto del terreno se le quiera dar algún uso se le puede dar”.
