Dicen que los canales llevaron el agua y Las Médulas se quedó con la fama. Las estructuras que componen la red hidráulica más importante del Imperio Romano aspiran todavía a su declaración como BIC (Bien de Interés Cultural) cuando la antigua mina de oro ya ha hecho las bodas de plata como Patrimonio de la Humanidad en el corazón del Bierzo. Pero ahora uno de esos elementos claves en el sistema de explotación usado hace 2.000 años se ha puesto en el candelero por un proyecto para hacerlo transitable en bicicleta. La iniciativa ha levantado ya polvareda por la oposición de la Asociación de Amigos del Patrimonio Cultural de León Promonumenta y del arqueólogo considerado como el mayor experto en el paraje, Javier Sánchez-Palencia, quien alerta de que la iniciativa no sólo amenaza el nombramiento como BIC sino la propia consideración de Las Médulas. Sus promotores, con la Junta de Castilla y León a la cabeza, defienden su importancia como factor de dinamización turística.
Hay dos carreras que hay quien considera lanzadas en sentidos opuestos por la misma administración con apenas un año de diferencia. La Consejería de Cultura y Turismo de la Junta liderada todavía en diciembre de 2021 por Ciudadanos encargó a un equipo multidisciplinar encabezado por el antiguo arqueólogo del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas) Javier Sánchez-Palencia un estudio para avalar la declaración BIC de los canales romanos y cuyos resultados se presentaron hace seis meses. La Consejería de Medio Ambiente aprovechó, por boca de su titular, el leonés Juan Carlos Suárez-Quiñones (Partido Popular), las celebraciones del 25.º aniversario de la declaración de Las Médulas como paraje Patrimonio de la Humanidad el 4 de diciembre de 2022 para anunciar una intervención con fines turísticos en uno de los canales. Al día siguiente Sánchez-Palencia ya hizo llegar a la administración autonómica su inquietud por este proyecto.
La iniciativa fue autorizada el 1 de marzo de 2023 por la Comisión de Patrimonio Cultural de Castilla y León (que reemplaza a las territoriales en el caso de intervenciones en Bienes de Interés Cultural incluidos en la Lista de Patrimonio Mundial a excepción de los declarados con la categoría de Conjunto Histórico) y por el Servicio Territorial de Medio Ambiente el 4 de abril del mismo año incluyendo un control arqueológico del movimiento de tierras. El pasado 24 de enero comenzaron los trabajos de acondicionamiento para establecer una ruta que une la localidad de Peñalba de Santiago (en el municipio de Ponferrada) con el propio yacimiento arqueológico de Las Médulas a través de un recorrido de alrededor de 60 kilómetros de longitud sobre uno de los canales utilizados en su día para conducir el agua que acabaría removiendo las montañas para extraer el oro hasta dejar las características formas del paraje.
Las Médulas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad entre otras cuestiones por su grado de conservación. Su integridad y su autenticidad fueron parte de sus grandes valores ante la Unesco
La discrepancia es tal que incluso comienza con la propia denominación del canal. El ingeniero de Minas redactor del proyecto, Roberto Matías, habla de CN-2. El arqueólogo Sánchez-Palencia lo hace de C-28. Y es muy crítico con una reconstrucción en mampostería de un tramo de unos 30 metros como elemento de interpretación (Matías se remite a un ejemplo similar en el entorno de Puente de Domingo Flórez). “Las Médulas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad entre otras cuestiones por su grado de conservación. Su integridad y su autenticidad fueron parte de sus grandes valores ante la Unesco”, expone Sánchez-Palencia, para quien este proyecto supone “una alteración de esa integridad”. “Se está destruyendo el registro arqueológico (…) y no hay prevista ninguna analítica arqueológica”, advierte hasta preguntarse “dónde está el plan de conservación del canal” y sugerir como alternativa el acondicionamiento de sendas paralelas.
Matías, que afirma que “una parte importante de los canales fueron utilizados durante siglos por la población de la zona” y apunta que “el senderismo garantizaría la preservación”, se remite a los permisos de los departamentos de Medio Ambiente y Cultura de la Junta y la “unanimidad absoluta” de las juntas vecinales implicadas en el trazado. Y aunque sobre el papel la administración hable de una ruta de 60 kilómetros, este ingeniero de Minas reduce el aprovechamiento específico para BTT (Bicicletas Todo Terreno) a un descenso entre La Aquiana y San Clemente que “atravesaría perpendicularmente” el canal con la opción de transitarlo por un tramo. “Por ese tramo de canal llevan ya varios años circulando las bicicletas sin ninguna protesta”, remarca.
Hay en esta intrincada carrera una meta volante clave: los trabajos de acondicionamiento realizados por población de juntas vecinales del entorno y miembros de Promonumenta para la grabación del programa del leonés Jesús Calleja en Cuatro Volando voy, emitido en el verano de 2022. Promonumenta circunscribe lo hablado entonces a unos trabajos de limpieza para facilitar el paso por el canal como ruta de senderismo. “Pero senderismo a pie, que eso no hace daño (…). Con lo que no estamos de acuerdo es con que pasen bicicletas porque una bicicleta derrapa, frena, corre mucho. Y destroza el canal a la vuelta de poco tiempo”, advierte el presidente del colectivo cultural, Nino Fernández. El redactor del proyecto sostiene que el acondicionamiento realizado para el programa ya iba encaminado a la ruta para BTT. El propio Calleja, involucrado en una iniciativa similar denominada Zona Alfa León en la Montaña Central Leonesa, parece ‘allanar el camino’ con una reciente publicación en la red social X (antigua Twitter). “Este paisaje (en alusión a Las Médulas) para mí es como el paraíso. Es una locura para la bicicleta de montaña y para el senderismo”, proclama.
No hay que impedir que el Bierzo tenga oportunidades de futuro, de actividad económica y de empleo
Lo que subyace bajo esta polémica también son dos maneras distintas de mirar el patrimonio como elemento susceptible de ser aprovechado turísticamente. El propio Sánchez-Palencia aplaude el uso como “recurso” dinamizador de la zona de Las Médulas: el pasado 2023 batió su récord con más de 100.000 visitas cuando en 1996, durante los trabajos previos a la declaración en 1997 como Patrimonio de la Humanidad, este arqueólogo se recuerda durmiendo en las antiguas escuelas de La Chana, cedidas por el Ayuntamiento de Borrenes, ante la ausencia de alojamientos. “Pero hay quien pretende que los BIC se autofinancien. Y eso es absurdo. Lo que sí pueden producir son una serie de ingresos indirectos vía turismo”, defiende Sánchez-Palencia, a quien Promonumenta enviará para su asesoramiento el escrito de oposición a la ruta BTT que ultima antes de remitirlo en próximas fechas a las consejerías de Cultura y Medio Ambiente.
“No hay que impedir que el Bierzo tenga oportunidades de futuro, de actividad económica y de empleo”, sostuvo hace apenas unos días en Bembibre el consejero de Medio Ambiente de la Junta, Juan Carlos Suárez-Quiñones, para quien el proyecto está “técnicamente muy trabajado”. Lo dijo, preguntado por la polémica desatada, sin eludir la posibilidad de escuchar las voces críticas con la iniciativa deslizando que “a lo mejor no conocen perfectamente el proyecto”. “Hay que enseñarles bien el proyecto, hay que ver qué es lo que pueden aportar (…). Vamos a escucharles y después trataremos de trabajar todos juntos”, concluyó unos días después de que el propio concejal de Turismo del Ayuntamiento de Ponferrada, Iván Alonso (Coalición por el Bierzo), sentenciase en alusión a las hacenderas realizadas para acondicionar el canal: “Creo que es bastante más impactante una azada que un neumático”. Roberto Matías lo presenta como “una continuidad” de los trabajos de acondicionamiento hasta catalogarlo como un “proyecto de desarrollo sostenible”.
La carrera para hacer pasar las bicicletas por los canales ya pasó la etapa de los permisos y está en plena ejecución de los trabajos. Promonumenta alerta de que su aplicación abriría la puerta a la circulación de motocicletas y quads (sin obviar que estos últimos ya lo están haciendo en algunos tramos) hasta producir un daño que “sería mucho más grave”. Sánchez-Palencia considera que la iniciativa amenaza la declaración BIC de los canales romanos al “perder autenticidad”. “Y también podría afectar a Las Médulas”, alerta con la esperanza de que “pueda detenerse la ejecución” en referencia a la meta de una carrera que levanta una polvareda visible mucho más allá de la antigua mina de oro explotada en tiempos del Imperio Romano.