Los pueblos de La Somoza, en la zona de Villafranca del Bierzo, alertaron este miércoles de que a mediados de este mes de abril se quedarán sin teléfono al dejar de funcionar las líneas por cobre. Así lo trasladaron los vecinos a través de un comunicado de prensa, en el que recuerdan que la mayoría de la gente que vive en esas localidades son personas de avanzada edad.
No obstante, desde Telefónica garantizan que esto no sucederá. La empresa está inmersa, desde hace más de un año, en un proceso a nivel nacional para migrar todas sus líneas de cobre a tecnologías de ultra banda ancha, coincidiendo con el centenario de la compañía y cumpliendo así con normativas europeas.
Con este plan los clientes pasarán de tener cobre a fibra óptica, en la mayoría de los casos, aunque hay zonas donde no se podrá usar ese servicio. “En ese caso se ofrece el servicio a través de satélite u ondas de radio, que funciona igual de bien que la fibra y ofrecen las mismas características. También hay sitios donde la instalación de esa fibra se está retrasando. Mientras tanto se les garantiza el servicio con esas alternativas”, precisan.
En todo caso recomienda a aquellos vecinos que tengan que hacer esa migración que se pongan en contacto con la empresa a través del teléfono 1004. Y recuerda que desde hace más de un año se ha comunicado a todos el fin del servicio con cobre, tanto en sus facturas de teléfono, como a través de llamadas, email e incluso burofax.
Los vecinos recibieron la comunicación de que el pasado 31 de diciembre dejarían de funcionar las líneas de cobre y deberían contratar la fibra para seguir teniendo teléfono. Pero a día de hoy la fibra sigue sin llegar, mientras que la línea de cobre dejará de dar servicio, de forma definitiva, el 19 de este mes, indican.
Ante esta situación, y mientras se instala la fibra, la compañía Telefónica ofreció la prestación por satélite, pero los vecinos aseguran que no han conseguido cerrar citas para la instalación de los equipos necesarios. A la vez, según explican, se suceden las llamadas de esa compañía ofreciendo el servicio por ondas de radio, algo que no es posible.
“La realidad es que muchos vecinos ven acercarse la fecha de vencimiento sin que ninguna de las soluciones propuestas se materialice”, trasladan a través de ese comunicado. “La situación en sí es grave, pero esta gravedad es extrema para la población anciana que no cuenta con familiares que les ayuden con las innumerables gestiones que hay que realizar para intentar eludir la incomunicación inminente a la que están condenados”, añaden.
“La nuestra no es una España vaciada, sino estrangulada por los poderes económicos y políticos locales, autonómicos y estatales cuyo objetivo único es la rentabilidad o el voto y que olvidan su verdadero cometido: velar por el bienestar y la seguridad de la población a la que representan”, finalizan.