El Ayuntamiento de Ponferrada ha cambiado de signo político este sábado en la constitución de los municipios tras las elecciones del pasado 28 de mayo. El popular Marco Morala es el nuevo alcalde al conseguir la confianza de la mayoría de la nueva corporación salida de las urnas con los 10 votos del PP, los 2 de Coalición por el Bierzo y los 2 de Vox.
El PSOE fue el partido más votado en las elecciones y logró 11 concejales pero Olegario Ramón ha dejado sus funciones como alcalde de la segunda ciudad de la provincia de León y capital del Bierzo tras un mandato de 4 años en el que gobernó con un tripartito conformado por sus ahora exsocios de Coalición por el Bierzo y Podemos, que no logró representación.
A la votación se presentaron dos candidaturas, la de hasta ahora alcalde Olegario Ramón, que recibió el voto del grupo del PSOE, y la del nuevo alcalde Marco Morala, que obtuvo 14 votos para ser investido nuevo regidor de la ciudad.
El nuevo alcalde ha señalado que su cargo “es el mayor honor” al que podía aspirar, “alcalde de las gentes que me han visto nacer, trabajar y formar mi familia”. “No concibo mejor reto personal ni más apasionante”, ha especificado. Morala ha asegurado que su programa electoral, “enriquecido con quienes colaboraremos en el próximo mandato” será el eje de su gobierno. “Ser ponferradino es una forma peculiar de ser español”, ha considerado para dejar entrever que será un mandato singular. El nuevo alcalde ha agradecido a quienes han apostado “por un cambio en Ponferrada”, reivindicando la legitimación del resultado de las urnas. “Considerar que hay concejales más o menos representativos o ilegitimados va en contra de la Constitución”, ha defendido, “todos representamos a las personas de Ponferrada y todos podemos presentar proyectos de impulso del municipio”, dejando abierta la negociación con la oposición durante su mandato.
“Reclamaremos por igual a todas las administraciones lo que es justo para Ponferrada”, aseveró para reclamar una mirada que no sea a corto plazo en un discurso en el que criticó el cierre apresurado de la minería “por ideología”, que finalizó con un Viva Ponferrada y Viva el Bierzo.
La expectación de la constitución y cambio de gobierno en Ponferrada hizo que a los políticos locales les acompañaran numerosos cargos públicos como la presidenta del PP de León, Ester Muñoz; el secretario general del PSOE de León, Javier Alfonso Cendón; o el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones, entre otros.
El acuerdo cede Cultura a la extrema derecha
El PP y Coalición por el Bierzo anunciaron su acuerdo a última hora de la noche del viernes, pero sin mencionar en ningún momento a Vox pese a que conformarán un tripartito. El partido regionalista berciano intenta así evadirse del acuerdo de PP y Vox con los que conformará gobierno. Bercianistas y populares detallarán en los próximos días el pacto aunque se sabe que está condicionado a inversiones millonarias ofrecidas por el PP y que las concejalías de Infraestructuras y Patrimonio y Desarrollo Industrial, Comercio e Innovación recaerán en manos de CB.
En cuanto al pacto del PP con Vox ambas formaciones anunciaron que la extrema derecha ocupará la presidencia del Instituto de Cultura de Ponferrada y el Instituto de Formación y Empleo, “sin que exista otra concejalía con competencias de cultura, formación ni de empleo” y, matizó, el PP, “dependiendo directamente estos Institutos del alcalde” Morala. Es decir, que los ediles de Vox dispondrán de ambas concejalías pero se cuidan de no llamarlas de tal manera.
El acuerdo tripartito ya supuesto la dimisión de la responsable de Igualdad en Coalición por el Bierzo, Berenice Arias, que ha dimitido de todos sus cargos obligada por “prinacipios morales básicos y a no pertenecer a un partido político que, aunque sea indirectamente, le da algún cargo o poder a la ultraderecha”.
El PSOE calificó este acuerdo a tres bandas como 'pacto de la motosierra' en alusión a una foto de campaña de la concejala de Vox, Patricia González, con esta herramienta delante de la sede consistorial anunciando recortes de políticas socialistas.