Basurco logra el objetivo: cruza el Estrecho a nado para visibilizar la lucha por más oncólogos para El Bierzo

Lo ha vuelto a hacer. El medio no es ningún impedimento cuando hay voluntad. Así lo ha demostrado una vez más el ultrafondista villafranquino Miguel Martínez Basurco, que cambió el asfalto por el agua hasta cruzar este miércoles a nado el estrecho de Gibraltar y cumplir el objetivo de visibilizar la lucha social por más oncólogos y una mejor asistencia sanitaria en El Bierzo. Otro reto superado; otra basurcada para la historia.
Parecía que los elementos le daban esta vez la espalda a Martínez Basurco, que tuvo que estirar su estancia en la zona hasta encontrar este miércoles las condiciones adecuadas para lanzarse al agua y cruzar en menos de cinco horas los 18 kilómetros que separan dos continentes para unir la reivindicación de miles de paisanos.
“Esto es por mi gente. Por todos los enfermos que pelean cada día sin descanso. Por Rosi, que ya no está… Hoy he nadado con el corazón más que con la mente, pero con el alma en paz. Cada uno de los que luchan por esta enfermedad tienen el mérito, no yo”, dijo nada más salir del agua en la costa africana el ultrafondista y carnicero mostrando una bandera de El Bierzo con uno de los lemas de la plataforma OncoBierzo: “Algún día es mucho tiempo”.
“Solo podemos decir gracias. Gracias por llevarnos tan lejos. Gracias por recordarnos que juntos, siempre, se puede”, respondieron desde OncoBierzo, la plataforma que ha liderado en los últimos meses la reivindicación por una mejor asistencia sanitaria, que sacó a miles de personas a las calles el pasado diciembre y que pensó en Miguel Martínez Basurco como banderín de enganche para hacer más visible su causa.
Basurco, que ya en diciembre de 1995 corrió 24 horas seguidas en Ponferrada para reclamar la llegada de los centros universitarios y en 2011 completó siete maratones consecutivos en contra de la incineración de residuos en la cementera de Cosmos en Toral de los Vados, aceptó el reto. Viudo de una paciente de cáncer, el componente más íntimamente personal también ha estado presente en esta basurcada que, en otro sentido, denota el cambio de objetivos de una comarca que en apenas 30 años ha pasado de luchar por lograr un servicio o hacerlo por no ver deteriorado otro.
Y es que el servicio de Oncología es el principal (aunque no el único) caballo de batalla en el área de salud berciana hasta el punto de que la fuga de médicos (apenas paliada hasta la fecha con el traslado puntual de facultativos de otras zonas) llegó a obligar en mayo del año pasado a suspender un día las consultas por falta de profesionales. Casi un año después, la noticia es otra basurcada, ahora para mantener en alto la reivindicación.