La negociación reduce el impacto del ERE de Teleperformance en Ponferrada, que mantendrá 193 trabajadores en plantilla

El ERE (Expediente de Regulación de Empleo) de la empresa de telemarketing Teleperformance que ponía en serio riesgo la viabilidad del centro de Ponferrada se ha saldado finalmente con un impacto menor al previsto en primera instancia. Serán finalmente algo más de 90 los afectados en la capital berciana (13 de ellos forzosos y el resto voluntarios) hasta dejar la plantilla en 193 trabajadores, según informa el sindicato CGT (Confederación General del Trabajo), que no ha firmado un acuerdo sí suscrito por CCOO, UGT y USO, al tiempo que ahora sopesa la posibilidad de ejercer acciones legales.
El de Ponferrada será el centro más afectado del país, pero los despidos están lejos de los 196 puestos sobre la mesa al principio de las negociaciones, una cantidad que comprometía seriamente el futuro de unas instalaciones que partían ya con menos de 300 operarios. La delegada de CGT en el Comité de Empresa Yerai Vidal augura la llegada de nuevas campañas que permitan al centro ser menos dependiente de los contratos con Vodafone.
Precisamente la “viabilidad a futuro” del centro de Ponferrada era una de las premisas con las que abordó la negociación la CGT, que se descolgó del acuerdo al aludir a “defectos de forma y fondo”. Así, el sindicato cuestiona en primer lugar la composición de la mesa negociadora al entender que “se estaba minorando” su representación como fuerza mayoritaria.
Además, la CGT pidió explicaciones a la compañía por la resolución de las campañas de Vodafone hasta sugerir una posible subrogación de la plantilla afectada. Y afirma haber constatado una “deslocalización” al comprobar que la carga de trabajo que perdía Ponferrada se estaba derivando a Colombia hasta realizar más de 300 contrataciones desde octubre en el país sudamericano, señala Vidal.
La representante sindical, que vincula el alto número de bajas voluntarias al “miedo al cierre” con que se afrontó el período de negociaciones, remarca que el futuro del centro de Ponferrada pasa por garantizar una carga de trabajo alternativa a las campañas de Vodafone.